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¿Tu hijo le tiene miedo a los perros? Consejos para superarlo

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Cuando se trata de las mascotas y los niños, siempre surge entre nosotros una inquietud: la posibilidad de que nuestro hijo sienta miedo a los perros. ¿Cómo podrías manejar la situación si ya hay una mascota en la familia y llega un nuevo bebé? ¿De qué forma podrías acostumbrar a tu hijo a tratar con un animalito si te pide que le regales un cachorro?

 

Ambos son panoramas muy singulares que como padre debes evaluar. Los perros suelen ser de las mascotas más comunes entre los niños. Es perfectamente normal que llegada una etapa de la infancia, tu hijo se entusiasme con la idea de tener a un cachorro como mejor amigo.

 

Sin embargo, en algunas ocasiones también podría convertirse en un motivo de estrés, especialmente para ti. Por ejemplo, si ya tienes a una mascota en casa y el perro le gruñe a tu hijo o si la mascota tiene la intención de morderlo, es normal que quieras hacer todo lo necesario para evitar inconvenientes y de esa forma prevenir males mayores.

 

Hoy te hablaremos un poco acerca de las causas más comunes por las que los niños pueden sentir miedo a los perros. También te contaremos qué factores podrían estresar o irritar a tu mascota acerca de la llegada de un niño a casa y, lo más importante de todo: te daremos algunos consejos para manejar la situación.

¿Por qué tu hijo le teme a los perros?

Al comienzo de este texto comentábamos que pueden existir al menos dos situaciones en las cuales se origine la interacción de un niño con un perro. Una en la que el pequeño se interesa por la mascota, pero no sabe exactamente cómo interactuar con ella y la segunda, en la que posiblemente ya haya una mascota en casa y llega a la familia un nuevo integrante.

 

Comencemos por el primer caso. Es normal que los niños sientan interés por los perros. Son animales amorosos, graciosos, buenos compañeros y probablemente ve cómo otros pequeños de su edad comparten su tiempo con un animal de compañía.

 

Sin embargo, este interés por un perro no descarta que tu hijo no sepa exactamente cómo comportarse con uno. Pensemos en primer lugar en la edad del niño. Es normal que tratándose de un niño pequeño, un animal grande, ruidoso y fuerte, le produzca un poco de ansiedad o miedo.

 

Es cierto que el miedo a los perros no está del todo descartado en los niños pequeños, pero tampoco es una condición permanente. Con el apoyo de los padres y la elección correcta de la mascota, puedes tener por seguro que tu hijo se sentirá completamente cómodo con la compañía de un perro en casa.

 

También es importante educar para la prevención. Tu hijo debe entender que tener en casa a un perro empático y amoroso, no hace que todas los animales se comporten de la misma manera. Allá afuera podrá toparse con animales agresivos, ansiosos o irritables que podrían representar un peligro para su integridad.

¿Cómo manejar el miedo a los perros si ya hay una mascota en casa?

En este caso el temor a la posible reacción del animal proviene más de los padres que del bebé. En primer lugar debes entender que el proceso de socialización del perro con tu hijo debe ser paulatino, comprendiendo que durante los primeros meses de vida lo más prudente es evitar los acercamientos.

 

Por otro lado, y aunque temas que tu perro lastime a tu hijo, piensa en esto: nadie conoce a tu mascota mejor que tú. Tú sabes bien si se trata de un animal celoso, posesivo, irritable o si por el contrario es amoroso, juguetón, curioso y sociable.

 

La raza del perro también influye mucho en su comportamiento y en la disposición del animal para mostrarse más cercano o arisco con el pequeño. Hay razas que son perfectas para convertirse en los compañeros ideales de los niños, mientras que hay otras que no se muestran tan tolerantes con esta idea.

 

Los ruidos del bebé, la ansiedad que le produce al perro la llegada de un nuevo integrante a la familia, las interacciones bruscas por parte del pequeño, pueden convertirse en factores irritantes que pongan al animal nervioso o le provoquen estrés.

 

Si tu perro es irritable y da muestras de recelo, sé muy cuidadoso con la interacción y evita los acercamientos sin la supervisión de un adulto. Ten presente que las estadísticas demuestran que el miedo a los perros tiende a aparecer en los niños a la edad de los 18 meses. 

 

Comprenderás que si su interacción con un animal de esta especie es satisfactoria, el pequeño se sentirá seguro ante la presencia de una mascota.

¿Cómo puedo ayudar a mi hijo a superar el miedo a los perros?

Lo primero que debes hacer es educar al niño acerca de los beneficios y las ventajas de tener a un perro en casa, antes de colocarlo en la posición de convivir con uno. Si el niño siente miedo a los perros, es probable que haya tenido una mala experiencia con uno en sus primeros meses de vida.

 

Si te pide un cachorro de mascota, pero sabes que existe cierto temor o recelo, puedes comenzar inculcando la idea de una forma divertida, edificante y segura. Un buen método es ver imágenes, videos o películas donde aparezcan perros inteligentes o graciosos.

 

Puedes demostrarle, con hechos, que no hay nada qué temer y que no todos los perros son agresivos, mucho menos poco amistosos. Una vez que hayas realizado en casa este trabajo, piensa en la raza.

 

No se trata únicamente de cumplir las expectativas de tu hijo con respecto a la raza o las dimensiones del perro. Si el niño se inclina por un animal grande, pero el espacio en el que viven es pequeño, a la larga la decisión se convertirá en un problema. Podrías llegar a tener en casa a un animal ansioso e irritable y, posiblemente, agresivo a largo plazo.

 

Negocia con tu hijo. Muéstrale opciones de razas más pequeñas, accesibles, amorosas e inofensivas. Si piensas en adoptar a un mestizo, ve con el niño a un refugio de mascotas y permítele que vea los animalitos disponibles. Explícale de un modo amoroso y razonable cuál de ellos podría adaptarse mejor a la familia y por qué.

 

La elección del animal indicado es crucial para que la convivencia entre el niño y el perro sea feliz y satisfactoria.

¿Cómo enseñar a tu hijo a interactuar con una mascota?

Por último, no olvides la importancia de la interacción. En primer lugar, la supervisión de un adulto mientras el niño comparte con el perro es indispensable. No sólo evitarás accidentes, también podrás corregirlo y educarlo con ejemplos acerca de cómo debe interactuar con el animalito.

 

Los perros son sumamente beneficiosos para los niños, porque refuerzan su autoestima, enriquecen sus habilidades sociales y sobre todo los educan en aspectos como la empatía, la responsabilidad y el servicio a los demás.

 

Enséñalo a relacionarse con el animal desde el respeto, la tolerancia y muy especialmente el amor. De la educación y el apoyo de los padres dependerá el tipo de relación que el niño desarrolle con su perro.

 

Sabemos que el miedo a los perros puede sonar como una situación álgida o difícil, pero puedes estar seguro de que con una correcta intervención por tu parte, todo saldrá bien y tendrás a un amigo leal y amoroso que acompañará a tu hijo por muchos años.

 

Referencias:

Iratxe López (2019). Consejos para ayudar a tu hijo a superar el miedo a los perros. Iratxe López Psicología. Recuperado de: https://iratxelopezpsicologia.com/consejos-para-ayudar-a-tu-hijo-a-superar-el-miedo-a-los-perros/

 

Silvia Díaz (S/F). Mi hijo tiene miedo a los perros: como puedes ayudarle a superarlo. Bebés y Más. Recuperado de: https://www.bebesymas.com/consejos/mi-hijo-tiene-miedo-a-perros-como-puedes-ayudarle-a-superarlo

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