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Enseña a tus hijos cómo cuidar a un gato

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Si te preguntas cómo cuidar a un gato, tenemos una muy buena noticia para ti: puede ser una experiencia gratificante tanto para los padres como para los hijos. Además, aportará muchos beneficios a la familia.

 

Cuidar a un gatito no sólo aportará alegría a la familia, sino que también puede enseñar a los niños responsabilidad, compasión y amabilidad. Sin embargo, la responsabilidad de cuidar de una mascota también conlleva la necesidad de saber cómo hacerlo correctamente.

 

Enseñar a su hijo a cuidar responsablemente de los gatos puede parecer una tarea complicada para papá y mamá, pero con la orientación adecuada, no tiene por qué serlo. Esta guía proporciona a los padres la información esencial que necesitan para ayudar a su hijo a convertirse en un cuidador responsable de mascotas.

 

Desde aprender los conceptos básicos del cuidado de un gato hasta comprender sus necesidades, esta guía proporcionará a los padres las herramientas que necesitan para asegurarse de que su hijo cuida de su mascota de forma segura y eficaz.

¿Cómo elegir al gato adecuado para tu hijo?


Hay muchos tipos de gatos, pero tal y como ocurre con los perros, no todos son adecuados para los niños. Dependiendo de las primeras semanas de vida del gatito, podemos encontrar a mininos muy dóciles, mientras que otros son definitivamente más indiferentes con el contacto humano.

 

Esto dependerá siempre de las condiciones en las que haya nacido la mascota, las características de la madre y cuán pronto fueron socializados con humanos. Recuerda que el gato, a diferencia del perro, puede desarrollar una conducta salvaje, especialmente si no ha tenido aproximación amigable con personas en sus primeros dos meses de vida.

 

Si el gato no tiene contacto con los humanos durante sus primeros meses de vida, podríamos tener a un animal:

 

  • Sumamente tímido.
  • Irritable.
  • Agresivo.
  • Que huya de casa o que desarrolle problemas de conducta.

 

No estamos queriendo decir con esto que un gato de estas características no merece la oportunidad de tener un buen hogar. Lo que intentamos señalar es que una mascota con una conducta más tímida o irritable, podría no ser la más indicada para un niño.

 

Precisamente por esto, si en casa hay pequeños y estás pensando en el gatito como un compañero para tus hijos, asegúrate de que sea un animal sociable y manso. Algunas camadas nacidas en hogares o en albergues se adaptan muy bien a este perfil, porque están acostumbrados al afecto y la proximidad de las personas.

¿Cómo cuidar a un gato? Consejos básicos para tu hijo 

Lo mejor siempre es enseñar con el ejemplo. Si quieres que tu hijo aprenda cómo cuidar a un gato correctamente, es ideal que tú como padre o madre tengas algunas nociones al respecto. Deberías saber al menos que a diferencia de los perros, los mininos necesitan de un arenero, rascadores y otros utensilios para divertirse sin ocasionar destrozos en casa.

 

Los gatos suelen ser independientes la mayoría de las veces, pero necesitan ayuda humana en determinados momentos. Esto incluye que reciba la alimentación adecuada en las proporciones razonables, que se hidrate bien y que su arenero esté siempre limpio.

 

Tu hijo deberá entender cuáles son las necesidades del gato para poder satisfacerlas sin problemas. Dependiendo de la edad del niño, lo ideal es que papá y mamá lo acompañen en estas tareas. 

 

Enséñale que la disciplina, la empatía y el sentido común son indispensables cuando se trata de cuidar de un animalito. Deberá entender que su gatito también sentirá hambre y que hay que respetar los horarios y las raciones de alimento, porque de lo contrario esto tendrá consecuencias.

 

Así mismo explícale la importancia de que su arenero se mantenga limpio. Comprender las necesidades del gato es vital para cuidarlo. Un arenero impecable evitará que el gato desarrolle malos hábitos y lo hará sentir más cómodo.

 

Del mismo modo también es importante que el niño sepa que debe dedicar momento del día a los juegos y otros cuidados básicos, como el cepillado. Intenta estar presente cuando el pequeño interactúe con la mascota. Indícale que debe ser cuidadoso, compasivo, por su bien y el del animal.


Está demostrado que enseñar a nuestros hijos a tratar con afecto, delicadeza y suavidad a los animales, les ayuda a desarrollar valores como la empatía y la compasión, además de ser responsables.

Establecer una rutina es muy importante

Los perros y los gatos son animalitos de rutina. Es precisamente por esto que tener ciertos hábitos no solo es crucial para la mascota. También ayuda al niño a tener un horario y a cumplirlo responsablemente.

 

Educa a tu hijo en cosas como:

 

  • Respetar la hora de la comida de su mascota.
  • Tener un momento fijo del día para asear la caja de arena del gato.
  • Disponer de un poco de tiempo para el juego y el cepillado.

 

Por suerte, un gato no necesita de paseos diarios, como ocurre con los perros. Precisamente por esto, se hará mucho más simple que el niño aprenda cómo cuidar a un gato en un entorno seguro y controlado.

Construyendo una sana convivencia desde el principio

Recuerda que a diferencia de los perros, los mininos son muy cuidadosos con su espacio y la más mínima alteración podría afectar su conducta. Es por esto que te recomendamos introducir a la mascota adecuadamente en tu hogar. 

 

Los primeros días, el niño deberá ser paciente, dar a la mascota tiempo y respetar su autonomía, para que se adapte sin problemas. Es importante que el pequeño sea afectuoso, como también es crucial evitar las brusquedades o los malos tratos. 

 

Sé prudente. Recuerda que el niño estará muy emocionado por la llegada de su nuevo mejor amigo, pero el gatito también estará estresado. Por esto, la mascota podría reaccionar desfavorablemente a cosas como las persecuciones, la imposición de las caricias, que el niño quiera tomarlo en brazos aunque él no quiera, etc.

 

Explica a tus hijos con paciencia y cariño las razones por las cuales debe ir despacio al construir una relación con su nueva mascota. Será menos frustrante para el pequeño y más fácil de manejar por parte del gato.

Edúcalo en los cuidados y la conducta felina

Habla con tus hijos acerca de la importancia de cuidar de su nueva mascota. Hay algunas responsabilidades de las cuales no podrá hacerse cargo, pero tu podrás explicarle su importancia. Estamos hablando de cosas como:

 

  • La desparasitación del gatito.
  • Visitas al veterinario.
  • Vacunas.
  • Uso de medicamentos en caso de enfermedades menores.
  • Cuidados luego de la esterilización de la mascota.

 

El niño debe entender cuán importante es velar por la salud de su gato y cómo eso repercute también en el bienestar de toda la familia.

 

Indudablemente es una responsabilidad grande para un pequeño suministrar un medicamento a una mascota y tú como adulto deberás hacerte cargo. Sin embargo, puedes hacerle entender por qué es crucial que la familia se preocupe por la integridad de la mascota.

 

Esto le enseñará valores como el compromiso, pensar también en el bienestar del otro y entender que hay responsabilidades que son para toda la vida. Es vital que el niño entienda que tener a un gatito en casa y hacerlo parte de la familia no es un capricho, es un pacto de amor y lealtad.

 

Siguiendo estos consejos no dudamos que tu hijo aprenda cómo cuidar a un gato en muy poco tiempo. De seguro disfrutará junto a ti la aventura de compartir la vida con un animalito amoroso e incondicional.

 

Referencias:

Sepicat (2019). Cómo enseñar a los niños a cuidar un gato. Sepicat. Recuperado de: https://www.sepicat.es/como-ensenar-a-los-ninos-a-cuidar-un-gato/

 

Equipo veterinario (2016). Niños y Gatos: Cómo enseñar a un niño a tratar a un gato. Veterinario Gatos. Recuperado de: https://www.veterinariogatos.com/ninos-y-gatos/

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